Syd Barret Autoretrato de un creador

Antes de llegar a ser Pink Floyd, la banda se llamaba Sigma 6, y fue cuando se integraron Roger Waters, Nick Mason, Richard Wright y Syd Barrett que cambió el nombre a Tea Set, con el que se mantuvieron por mucho tiempo, antes de descubrir que había una agrupación que llevaba el mismo nombre, y que además llevaban más tiempo tocando. Esa fue la razón por la cual decidieron llamarse The Pink Floyd Sound.


Usando a Pink Anderson y Floyd Council como punto de partida para dar vida a lo que pronto se convertiría en una de las bandas de rock más radicales de la década de los 60. Syd Barrett merece su propio lugar en la historia, pues aportó a la música dos pilares que componen la estructura de Pink Floyd; ‘The piper at the gates of dawn” (1967) y "A saucerful of secrets’"(1968), álbumes que llevan la marca de Barrett en todos los aspectos. Después de su exclusión de la agrupación lanzó dos álbumes más que nos mostraron un lado de brillantez único e irrepetible: "The Madcap Laughs" y "Barrett".

Luego del declive emocional y de su trayectoria musical, Barrett volvió a lo que probablemente haya inspirado sus mejores procesos creativos: la pintura, pues además de ser músico y un poeta excéntrico, también gustaba de la creación visual, viviendo como un ermitaño, aumentando de peso y perdiendo la noción de la realidad. Syd tuvo una vida aparentemente tranquila en Cambridge hasta su deceso el 7 de julio del 2006.

Tras diez años de la pérdida del fundador de Pink Floyd, la exposición "Syd Barrett: Art and Letters",  en la galería Idea Generation, lleva al público una recopilación de cartas, fotografías y obras de arte de su autoría, las cuales se vinculan directamente con la carrera artística del genio. Este material fue extraído del libro "Barrett: The Definitive Visual Companion", publicado por Essential Works.

Abarcando toda la trayectoria musical de Syd -como integrante de la banda y su etapa después de Pink Floyd-, estas imágenes pretenden ilustrar un poco la genialidad mítica que envuelve a Barrett. Dentro de la exposición también se incluyeron cartas, mostrando el lado más amoroso e íntimo del viajero astral. Syd se interesó por el arte desde pequeño, pero fue en su época de estudiante que asistió a Camberwell, Escuela de Artes y Oficios de Londres. En esta imagen vemos a un joven Syd posando con uno de sus trabajos en la primavera de 1964.

Fue hasta que Syd abandonó la banda en 1968, cuando pudo volver a pintar.